Entre que pensaba con que estrenar mi blog decidí poner este poema, que aclaro, no trae dedicatoria alguna para nadie, solo fue un poema que salio de una chaketa mental (después explicare que es para evitar desvarios) y de este tambien hay un cuento que aun no termino por razones de weba mayor.
Te lloro, pero sigo cogiendo
Aun no te habías ido y yo ya lloraba
No se si por el espacio vacío que dejaste
O el rincón húmedo que te llevaste,
Quizá el miedo a volver a besar la soledad.
Me aferré a tus faldas para secar mis lágrimas,
Me arrastre a ti como perro mal herido,
Intenté atarte a mí con palabras bonitas
Pero cayeron al piso antes de llegar a tus oídos.
Un adiós entrometido fue tu última palabra
Y entonces los ojos se me fundieron de tristeza,
La boca se me hizo espuma de maldiciones,
El cuerpo se me retorció de frío y dolor.
En mi cráneo, prisión de mis pensamientos,
El eco malévolo de tu despedida haciendo ruido
Y los restos de tu olor corroyendo las paredes
Terminaron partiendo en dos mis deseos de ti.
Comiendo pedazera de corazones rotos,
Bebiendo besos con sabores extraños,
Subiendo faldas cortas y bajando largas ganas
Me fui recordando a golpes que debía olvidarte.
Pero aun te lloraba entre desvestida y envestida
lloraba por lo ojos en mi soledad nocturna,
A veces lloraba dormido entre sudores
Y te lloraba lágrimas de semen cuando podía.
Por cada encuentro carnal obligatorio
Se me olvidaba una letra de tu nombre
Empecé por el primero tan corto y dulce
Y para no fallar me seguí con tus apellidos.
Entendiendo esto como que el sexo da amnesia
Me receté un par de piernas cada 24 horas,
Una caja de besos en caso de dolor extremo
y un sexo oral por si persisten las molestias.
Sigo esperando que regreses con una sonrisa
Y me digas que también me has extrañado
Y mientras Dios se apiada de mi triste sueño
Te lloro y te lloro mucho, pero sigo cogiendo.
D. Yaurima P.